El expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump (2017-2021) y una de sus abogadas, Alina Habba, ofrecieron pagar una fianza de 1,03 millones de dólares para apelar la orden de un juez que los sancionó con 937.989 dólares por presentar una demanda «frívola» de conspiración contra Hillary Clinton y otros.
La multa de 937 mil dólares se basa en una orden de un juez de Florida, el cual acusó al exmandatario de acudir a un recurso judicial por motivos netamente políticos de desprestigio en contra de Hillary Clinton, quien era su competencia electoral en la carrera presidencial de 2016.
El equipo de abogados del expresidente Donald Trump anunció que pagará una cuantiosa fianza de 1,03 millones de dólares, cantidad que representa el 110 % de la multa que pesa sobre el magnate republicano, para suspender una demanda en su contra presentada por la demócrata Hillary Clinton.
Asimismo, el equipo legal sostiene que Clinton no se opuso al pago de la millonaria fianza.
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Trump y Habba hicieron la oferta el viernes en una carta al juez de distrito Donald Middlebrooks en Florida, pidiéndole que pusiera su orden de multa en suspenso mientras apelaban.
El juez ordenó el mes pasado a Trump y Habba pagar conjuntamente los honorarios y costes asumidos por Clinton y los otros acusados mientras defendían las acusaciones presentadas por el líder republicano.
La situación legal en la que se ve envuelto Donald Trump, sumada a varios escándalos políticos como el hallazgo de documentos clasificados en funcionarios de gobierno de alto rango, entre los que figura el mismo Trump, desprestigian su imagen de cara a sus aspiraciones a la presidencia en las elecciones de 2024.
La demanda en contra de Trump fue también presentada en contra de su abogada, Alina Habba, en marzo de 2022.
El caso fue remitido al judicial por un grupo de 18 firmantes, entre los que figuran Hillary Clinton, el exdirector del FBI, James Comey y el Comité Nacional del Partido Demócrata.
El ente acusador alega que fueron víctimas de una conspiración en su contra orquestada por Donald Trump, con el objetivo de desprestigiarlos con acusaciones referentes a una supuesta colaboración con Rusia durante las elecciones de 2016.
El juez federal encargado del caso declaró que la primera demanda presentada por Trump en contra de Hillary Clinton fue una «frívola» estrategia «destinada a un fin político» y que «ningún abogado razonable la habría presentado».